En este último año y provocado por la pandemia principalmente, hemos observado grandes cambios en el sector inmobiliario.
Aunque a nivel valor, se estima un comportamiento estable y positivo en el precio de las propiedades lo que están surgiendo son nuevos modelos de vivienda que tienen como protagonista al alquiler frente a la compraventa tradicional.
Uno de esos modelos es el Build to Rent (construye para alquilar), que ha subido en la escalera de alternativas para cubrir las nuevas necesidades de habitabilidad surgidas después de la pandemia.
Build to rent es una de las soluciones creadas para cubrir la demanda del mercado que no puede acceder a la compra de viviendas con unos tipos de interés claramente al alza o que busca soluciones flexibles y adaptables al momento actual. Es un nuevo fenómeno que ha llamado la atención de muchísimos inversores y que desde hace dos años (2020) ha traído al sector una inversión de cerca de 2.000 millones de euros.
El Build to rent se basa en viviendas de construcción nuevas destinadas exclusivamente para alquilar y que pertenecen normalmente a un propietario único o promotora que gestiona todo lo que conlleva el alquiler de estas viviendas.
Aunque España sigue siendo un mercado en el que la compraventa predomina sobre el alquiler (según datos de Eurostat, la oficina de estadística europea, más del 75% de la población posee viviendas en propiedad) las nuevas fórmulas de alquiler están ganando cuota de mercado.
Sus precios son muy competitivos y a medida que va en aumento la construcción y oferta de estas viviendas, empujará a la baja los precios del mercado.
El inquilino tendrá más ventajas ya que en grandes ciudades como Madrid o Barcelona, la oferta de viviendas en alquiler no es suficiente y con las nuevas construcciones tendrán mucha más oferta y al haber más oferta el precio será más asequible.
Otra de las ventajas del Build to rent, como sucede con el Co living (fenómeno similar al coworking laboral pero llevado a la vivienda) es la posibilidad de poder disfrutar de zonas comunes y servicios complementarios como la posibilidad de disponer espacios para trabajar, zonas deportivas, lavanderías, servicio de limpieza y hasta restauración.
En este contexto una parte importante de la población está empezando a ver el alquiler como una opción a largo plazo, ya que tenemos menos posibilidades para acceder a la vivienda en propiedad porque las entidades bancarias han ofrecido muy buenas condiciones de financiación para acceder a una hipoteca, pero dirigido a personas con capacidad financiera suficiente.
Los cambios en las necesidades y demandas de vivienda, que en muchas ocasiones requieren zonas para teletrabajar (nómadas digitales) o de ocio con opciones de alquiler flexibles y según las necesidades de cada persona, ha aumentado el interés por la creación de estos nuevos modelos de alquiler.
Los aspectos más relevantes a la hora de buscar una vivienda en estos momentos pasan por factores como la eficiencia energética, las zonas para teletrabajar, las terrazas, la luminosidad, los elementos de diseño y confort, etc. y todas estas características están mucho más presentes en la oferta de obra nueva.
Este nuevo modelo, el Build to Rent, presenta además un menor riesgo comercial, ya que para los inversores no sienten la incertidumbre de si estas viviendas se venderán o no. Además, a largo plazo, lo normal es que generen más rentabilidad ya que siempre estarán en movimiento.
En este tipo de viviendas cambia la configuración habitual de una propiedad. Empezaremos a observar en las viviendas un espacio habitable más pequeño y zonas comunes más grandes, zonas más abiertas para socializar entre los inquilinos y con más servicios compartidos.
Son viviendas con la mayor comodidad posible y para disfrutar de una vida sana gracias a su distribución funcional, siempre abiertas hacia el exterior y adaptadas también para personas con movilidad reducida, un mundo ideal (al menos teóricamente) y lleno de oportunidades.
El modelo Built to Rent ha devuelto a la vida el alquiler y aumentará la inversión inmobiliaria tanto para grandes como pequeños inversores, ese al menos es nuestro pronóstico.
Para esta nueva modalidad de alquiler resultará crítico para el inversor la compra de la propiedad adecuada al precio adecuado en la localización adecuada. En ese sentido REA INMOBILIARIA tiene una amplia experiencia en localizar propiedades en la zona norte de Madrid, Alcobendas, La Moraleja y zonas limítrofes con posibilidades para lanzar proyectos inmobiliarios de este tipo.